A medida que el presidente Trump intensifica el uso de aranceles en un esfuerzo por corregir los desequilibrios comerciales, Asia se ha convertido en un objetivo principal.
Si bien China sigue siendo el principal objetivo, otras naciones asiáticas —entre ellas Japón, Corea del Sur, Taiwán e India— también están en el punto de mira de Trump debido a sus considerables superávits comerciales con Estados Unidos.
Desde automóviles japoneses y surcoreanos hasta semiconductores taiwaneses y productos farmacéuticos indios, muchas de las principales exportaciones de Asia se enfrentan a aranceles más altos bajo las políticas comerciales de Trump.
La región, que durante mucho tiempo ha dependido de la economía global, está experimentando ahora una importante interrupción en sus cadenas de suministro a medida que las empresas buscan alternativas.
En un informe del New York Times, expertos en comercio advierten que estas medidas podrían provocar una ola de proteccionismo, con países respondiendo mediante la imposición de aranceles propios.
La incertidumbre ya está remodelando las alianzas comerciales, reduciendo potencialmente la influencia de Estados Unidos en Asia.
Cómo es probable que los aranceles afecten a Asia
Desde su regreso al cargo, Trump ha impuesto un arancel del 10% a las importaciones procedentes de China y ha señalado su intención de ampliar los aranceles a múltiples sectores, incluidos los automóviles, los semiconductores, el acero, los productos farmacéuticos y la madera.
También ha planteado la posibilidad de imponer “aranceles recíprocos”, que gravarían los bienes de países específicos en función de factores como las políticas monetarias y las subvenciones internas.
Los economistas advierten que estos aranceles podrían tener consecuencias graves.
Según Morgan Stanley, los impuestos a las importaciones propuestos por Trump afectarían a una cuarta parte de las exportaciones totales de Asia.
Moody’s prevé que el crecimiento económico en la región se ralentizará hasta el 3,7% este año, frente al 4% del año pasado.
“Existe el riesgo de que Estados Unidos sobreestime realmente su influencia”, dijo Simon Evenett, profesor de la escuela de negocios IMD en Suiza.
“El mercado estadounidense sigue siendo el más grande del mundo, pero proporcionalmente es menor que hace 20 años”.
Cómo está respondiendo Asia a la amenaza arancelaria de Trump
Ante el riesgo de un acceso reducido al mercado estadounidense, varios países asiáticos están ajustando sus políticas comerciales en un esfuerzo por aliviar las tensiones.
Vietnam ha propuesto aumentar las importaciones de productos agrícolas estadounidenses, incluyendo la soja.
India ha reducido los aranceles sobre el bourbon, mientras que Corea del Sur ha prometido 249.300 millones de dólares en financiación comercial para apoyar a sus exportadores.
Sin embargo, estas medidas pueden no ser suficientes para evitar daños económicos más amplios.
Estados Unidos ha incluido a varias naciones asiáticas —entre ellas China, Japón, Corea del Sur, Singapur, Taiwán y Vietnam— en una lista de vigilancia de divisas, alegando que manipulan los tipos de cambio para obtener ventajas comerciales.
Las naciones del sudeste asiático también están lidiando con una afluencia de productos chinos, que han sido redirigidos desde el mercado estadounidense debido a los aranceles americanos.
Tailandia, Indonesia y otros países han visto cómo las industrias locales luchan por competir con las importaciones chinas de menor precio, lo que ha llevado a algunos gobiernos a considerar la imposición de sus propios aranceles.
“Ahora tenemos al mayor rival en nuestro patio trasero, y tenemos que preocuparnos por las medidas recíprocas que puedan venir de Estados Unidos”, dijo Priyanka Kishore, fundadora de la consultora Asia Decoded, con sede en Singapur.
Ganadores y perdedores en un panorama comercial cambiante
Si bien las políticas comerciales de Trump han interrumpido las cadenas de suministro, también han creado nuevas oportunidades para algunas naciones.
Países como Vietnam, Malasia y Tailandia, que han firmado múltiples acuerdos comerciales, están atrayendo a fabricantes chinos que buscan establecer bases de producción fuera de China.
Según expertos en comercio, las empresas chinas que establecen operaciones en estos países no están necesariamente eludiendo los aranceles estadounidenses.
“Si un productor chino simplemente reetiqueta mercancías en Vietnam para evitar aranceles, eso es una clara elusión de las normas comerciales”, dijo Manu Bhaskaran, socio de Centennial Group, una firma de asesoría política con sede en Singapur.
“Pero si una empresa china instala una fábrica en Vietnam y obtiene los materiales localmente, eso es una inversión legítima”.
Mientras tanto, están surgiendo nuevas zonas de comercio económico a medida que las empresas se adaptan a las condiciones cambiantes.
Un reciente acuerdo entre Singapur y Malasia ha atraído a empresas estadounidenses y chinas que buscan una alternativa a la fabricación en China.
Sin embargo, si más países adoptan medidas proteccionistas similares a las de Trump, el sistema de comercio mundial podría fragmentarse aún más.
El futuro de las alianzas comerciales de Asia
A medida que las políticas comerciales de EE. UU. continúan evolucionando, las naciones asiáticas están reevaluando sus estrategias económicas.
Algunos expertos creen que la cooperación regional podría servir de amortiguador frente a la postura agresiva de Washington sobre los aranceles.
“En Asia, estamos viendo que las cadenas de suministro se están regionalizando más”, dijo Albert Park, economista jefe del Banco Asiático de Desarrollo en Manila.
“Si los países de la región se mantienen abiertos al comercio y la inversión entre sí, eso proporciona una medida de protección contra los aranceles estadounidenses”.
Con la creciente participación de Asia en la economía global, las empresas podrían centrarse en atender a los mercados regionales en expansión en lugar de depender de la demanda estadounidense.
“Puede que simplemente veamos más inversiones dirigidas a estos mercados porque son más estables”, añadió Park.
Si bien los aranceles de Trump están remodelando el comercio mundial, también podrían acelerar el cambio de Asia hacia la autosuficiencia, lo que a largo plazo podría disminuir la influencia de Estados Unidos en la región.
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